Ingredientes:
Ajo (1 diente)
Caldo de verduras (o de pollo)
Cebolla (1/4)
Carne picada (400 gr)
Harina
Huevo
Jamón serrano (1 loncha)
Leche
Miga de pan duro (o una rebanada de pan de molde)
Pimienta
Pedro Ximenez
Perejil
Queso rallado
En un bol, mezclamos la carne picada, la miga de pan (mojada
en leche), un ajo picado, el doble de cebolla (que de ajo), igualmente picado,
y loncha de jamón muy picada, sal, pimienta, perejil fresco, dos cucharadas de queso
rallado, y un huevo. Mezclamos con las manos.
Nos frotamos las manos con un poco de aceite, y vamos dando
forma de bola. Pasamos las mismas por harina, y freímos en aceite muy caliente.
No es necesario que se lleguen a cocinar por dentro… únicamente es necesario
que se doren ligeramente. Reservamos sobre papel absorbente.
En la misma sartén, eliminamos el aceite casi por completo,
y sofreímos durante diez minutos, a fuego medio/alto, media cebolla, junto con
un par de ajos, todo ello muy picado.
Añadimos medio vaso de Pedro Ximenez (o en su defecto vino
blanco), y seguimos cocinando un par de minutos hasta que se evapore el
alcohol.
Incorporamos un vaso de caldo de verduras (o de pollo), y
cocinamos cinco minutos más.
Echamos las albóndigas que teníamos reservados, y terminamos
el guiso todo junto, durante unos cinco minutos.
Servimos acompañado de pasta fresca recién cocida (el tiempo
que indique el fabricante para que quede aldente), y un poco de perejil.